—¿Y Monster a qué viene?
—Ya. ¿Y… algo más?
—Es verdadero BDSM contemporáneo…
—BDSM conte… ¿qué?
—Que ocurre hoy, en EE.UU. Que el Amo adiestra a su sumisa bajo la más pura esencia del BDSM, gozando de su relación sexual a partir del uso de diferentes instrumentos que provocan dolor físico, potencian las sensaciones y resultan en orgasmos explosivos.
—¡Ya será menos!
—Hay fisting, plugs, ballgags, pinzas en distintas partes del cuerpo. Un futuro marido que reniega de la sierva… ¡Se te está poniendo cara de espanto!
—Es que empiezo a entender lo de monstruo…
—No creas. McNamara, ese es el nombre del Amo, es también un amante esposo, digno representante de la ley, papi ejemplar y si quieres más, ya sabes… a leer.
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